Capítulo V: salvada! Kagome sobrevive!
Habían pasado alrededor
de una semana, días en los cuales
todos trataron de saber qué pasó con Kagome. A Honshu les llegó la noticia
que Kagome y sus hombres habían tenido un ataque con seres extraño del modo
que ella no logró salir viva del modo que murió en el acto.
Miroku y Sango al
principio no lo creían y de ese modo intentan hacer todo lo posible para
encontrarla y... nada. Kouga pensaba que todo era una broma, pues siempre había
visto a Kagome además de una digna Jingo, como una guerrera de alto nivel.
El único que no se
tragaba mucho la noticia era Sesshoumaru, pues por alguna extraña razón
pensaba que alguien estaba detrás de todo...
El pueblo de Honshu
estaba de luto, no se imaginaban que su líder, la hija de Tenno hubiese muerto
de esa forma tan inesperada y mas... en aquél día, en el que todos los líderes(excepto
Naraku) estaban presentes en el castillo... Kikyou parecía que estaba muy
triste (si como no) por la pérdida de su hermana.
- Kagome... no puedo
creer que te haya pasado esto...- decía Miroku todo aflijido.
- No se merecía morir aún...-
Sango por su parte lloraba.
- Me he quedado sin
esposa!- dice Kouga mientras abraza a un serio Sesshoumaru.
- Silencio! No me toques
lobo sarnoso- decía el inu mientras lo quita de sus ropas.
- ¬¬ parece que eres
el único que no está afectado! Por lo que veo no sentías mucho aprecio por
Kagome!- comenta Kouga con una mirada muy seria.
- Kouga-sama por favor
no se altere- Sango intenta calmar al lobo que se estaba enojando por la actitud
de Sesshoumaru.
- Todos aquí estamos
alterados por todo esto- comenta Miroku.
- ESO NO ME IMPORTA!
SESSHOUMARU REALMENTE ERES UN SER DESPRECIABLE!!!!!!
- Silencio lobo! Mejor
me retiro de aquí, no puedo con este ambiente- el youkai de Hokkaido estaba
molesto.
El inu youkai se da
media vuelta y se dirige a la salida del lugar pero... es detenido por Kikyou,
éste no siente gran simpatía ante esa mujer pues sabe que no es de mucha
confianza.
- Lord Sesshoumaru, no
se puede ir... tenemos que terminar con todo esto... mi hermana estaría feliz
que se quedara- dice Kikyou con su fría mirada.
- Realmente usted es su
hermana?- pregunta el youkai con un aire de desconfianza que Kikyou nota.
- Nani?... por supuesto
que lo soy- contesta la mujer.
La mujer se acerca al oído
del youkai y le susurra algo que lo deja extraño y a causa de eso termina quedándose
ahí.
- No es bueno que
desconfíe... puede ser peligroso.
Tiempo después, Kikyou
estaba en ese balcón y a su lado Sango y Miroku seguido de Kouga y Sesshoumaru.
- Honshu... no sabe
cuanta tristeza me da decir que... Kagome Jingo... mi hermana y líder de esta
isla... ha... perecido- decía Kikyou bastante triste y con lágrimas en los
ojos.
La gente estaba
conmocionada a lo que estaban escuchando, Sango y Miroku tenían sus cabezas
bajas, Kouga algo serio y Sesshoumaru no estaba muy contento del todo, Kikyou
seguía dando un discurso algo largo pero hay un momento...
-... y como pueden
ver... mi hermana ha dejado el poder, de este modo yo... Kikyou hija de
Tenno-sama me nombro líder de Honshu.
- QUE? DEMO...- cuando
Sango escucha eso se queda casi sin habla.
- No te alteres, era
obvio- comenta Miroku alñ abrazarla un poco.
- ¬¬ no puedo permitir
que ella tome el lugar de Kagmoe!- replicaba la dama de compañía de Kagome-
Tenno-sama es el único que decidió quien iba a tomar su lugar!
La gente de Honshu no le
quedó de otra que aceptar eso, Kikyou en ese momento era la nueva líder de
Honshu, Kouga no estaba muy alegre y Sesshoumaru ni hablar; preferiría estar riñendo
con Kouga a que presenciar el acto mas hipócrita que uno haya realizado en
alguna ocasión.
- A partir de este
instante seré la nueva Jingo, así que me deberán tratar como fue a mi
hermana, así que... no quiero nada
de quejas!- ordenaba la mujer ante los súbditos del castillo.
- Sesshoumaru no le has
quitado la mirada en toda la ceremonia- comenta en secreto Kouga a su compañero.
- Porque siento que esto
no es normal, no sé presiento que Kagome está viva- comenta Sesshoumaru
mientras observa a Kikyou caminar por uno de los pasillos del lugar-... en algún
lado pero lo está.
- Ya sé que la querías
mucho pero creo que ya estás...- dice sonriendo Kouga mientras le da unas
palmaditas en su espalda.
Sesshoumaru pone sus
manos en su cuello y lo alza, el pobre lobo solo lo nervioso.
- Mi instinto nunca
falla ookami estúpido... ella está viva de eso estoy seguro- dice en tono
amenazante el inu.
- Eso... espero, pues
dudo mucho que aguante a esta mujer... es odiosa!- contesta entre nervioso y
molesto el ookami.
- Lo mejor sería actuar
con cautela y evitar que nos descubran...
- Ahora si no te
entiendo Fluffy- comenta Kouga luego de pisar tierra de nuevo.
- ¬¬ Fluffy?-
Sesshoumaru se uqeda molesto tras escuchar ese nombre-... pues descubriré a
como de lugar quien es realmente Kikyou...
- De acuerdo entonces yo
te ayudo.
De esa forma el inu
youkai deja libre a Kouga y siguen presenciando esa ceremonia....
Por otro lado, no se podía
saber exactamente que lugar, un ser de cabellos plateados largos, de ojos
dorados profundos y tenía unas graciosas orejitas que se movían de un lado a
otro por algún sonido extraño que lograba detectar, estaba
sentado en una roca, sus ropas rojas como el fuego se mojaban por las
olas que llegaban hasta donde estaba... parecía que observaba el mar.
El lugar estaba nublado
y solo se percibía tensión en el lugar.. Inuyasha observa un poco ese paisaje.
- Qué estará haciendo
Kikyou?
Pero sus pensamientos
son interrumpidos por Kagura.
- ¬¬ qué haces aquí?
No molestes- replica molesto Inuyasha al ver a Kagura a su lado.
- Ahh el perrito
favorito de Naraku se enojó... ¬¬ tengo un mensaje de él- contesta
fastidiada la mujer de los vientos.
- Dilo de una vez y
luego te retiras- contesta con molestia el hanyou.
Kagura detestaba esa
actitud de Inuyasha pues se creía como alguien importante, ella estaba por
abrir su abanico pero prefirió cumplir la orden de Naraku.
- Con respecto a Kagome
Jingo, ella murió ayer y Kikyou ha tomado el lugar de su hermana.
- Uy si que
interesante... es todo? ¬¬U- decía Inuyasha más que fastidiado.
- Iie falta algo mas...
dice que por ahora no te necesita pero estará en contacto contigo por si algo
pasa- explica la mujer.
- u.u eso era de
esperarse, ya podré hacer lo que mejor me da... hasta que terminé con este
trabajo, pero creo que lo mejor será que vaya a Honshu a ver a Kikyou- dice
Inuyasha mientras toma un poco de aire.
- No creo que fuese bien
visto, pueden sospechar...- comenta Kagura y al mismo tiempo cruza sus brazos.
- Soy el inu mas buscado
por todas estas islas como el ladrón y asesinoi mas famoso...- decía casi con
aires de superioriddad.
- ¬¬ que no se te suba
a la cabeza eso.
-... pero en Honshu
nadie me conoce, por eso tuve libertad para quemar ese lugar hace poco tiempo.
- No me importa lo que
hagas, no estamos contactando- se depside Kagura de Inuyasha.
De la forma en como
apareció de la misma forma desapareció, Inuyasha saca su espada de su cinto y
la observa detenidamente.
- Jejeje soy quien
gracias a mi Tessaiga, no crees así?
Pero de pronto huele
algo, ese olor lo conocía a la perfección pero un poco difícil reconocerlo a
causa del agua del mar.
- Sangre...?- dice extrañado
Inuyasha.
Comienza a buscar por
todos lados de donde provenía tal olor, cual va siendo su descubrimiento, que
en una roca cerca de ahí... trataba de detenerse algo, éste corre y ve que...
- Qué es?
Ve algo negro que
trataba de sostenerse en la roca, lo levanta y se lo lleva a un lugar a salvo,
cuando lo deja caer como costal de papas(¬¬ que poco sensible!) y se queda
helado... era una persona, con ropas de batalla; su largo cabello azabache
estaba mojado y aun seguía peinado con una coleta baja y sus mechones de
cabello salían de cada lado... su armadura estaba un poco destruida y su ropa
rasgada.
- Pero... si es un
humano? O.o- decía Inuyasha tras olfatear un poco el cuerpo.
De repente el hanyou ve
que se mueve un poco y abre sus ojos un poco.
- Sesshou... maru...
me... da.. gus...to....
Y no termina de hablar
porque pierde de nuevo el conocimiento, Inuyasha se da cuenta que estaba con
heridas muy graves y no duda en llevarlo a un doctor. Al paso de unos cuantos
minutos el doctor ve a Inuyasha.
- Joven Inuyasha que lo
trae por aquí?- saluda un ser extraño al hanyou.
- Encontré a un humano
en las costas Kyushu, está muy mal herido... lo puedes revisar?- dice Inuyasha
mientras en sus brazos llevaba el cuerpo sin conocimiento.
- Pero yo solo curo a
oni y seres como tú...- dice el doctor al ver a la persona.
- Vamos! Puedes
hacerlo!- suplicaba casi Inuyasha.
- De acuerdo.. se entera
Naraku-sama de esto y mi vida peligra.
De esa forma
el doctor revisa todo y comienza con la curación... en un instante de
nuevo ese ser abre sus ojos y ve a
un ser oni.
- Dónde estoy...?
- Pero si es una chica!
Cómo llegaste aquí?- decía sorprendido el oni al ver a la chica despertar.
- No... recuerdo nada...
me duele todo... argg!- hablaba con dificultad la chica, gracias a las heridas.
- Chica, no te muevas
pues tus heridas eran para que perdieras la vida- comentaba el doctor al
revisarla un poco.
- Megami Amaterasu me
salvó de esta- decía la chica casi en un susurro.
- Me puede decir su
nombre jovencita?
- Soy... Kagome-
contesta la chica.
- Lindo nombre, idéntico
de la líder de Honshu.
Kagome solo sonríe y se
queda dormida por unos días... pues estaba muy cansada. Cuando despierta,
Kagome se da cuenta que estaba en una especie de cabaña.
- Dónde estoy...?
Ve por todos lados y
parece que.
- Ya recuerdo... lo mas
seguro es que éste en Kyushu...
Y por su mente pasan
algunos recuerdos de esos días pasados.
-flash back-
- A ver si esquivas
esto.... DANZA DE LAS CUCHILLAS!!!!!!!!!!!!!
De ese instrumento
aparecen muchas cuchillas, Kagome estaba muy cerca para saltar pero... ella
voltea y no logra esquivar el ataque... siente como cada cuchilla pasaba por su
cuerpo, grita y al mismo tiempo cae
lentamente del barco... una de sus manos parecía querer algo...
- Jejejeje- la sonrisa
triunfante aparece en Naraku, lo había logrado.
Kagome siente que todo
se le vuelve negro... sus ropas se manchan de sangre y sus ojos se vuelven
blancos...
- No...
puede... ser... kami...- piensa la chica
mientras su vista se nublaba cada vez más.
Y cae al agua, la marea
en ese instante era muy fuerte y no se ve que el cuerpo aparece de nuevo Naraku
solo observaba.
-fin del flash back-
Kagome se asusta un poco
al recordar eso, siente que la cabeza le quiere estallar y desea olvidar eso.
- Ahora que lo
recuerdo...- se decía mientras se abrazaba así misma- Naraku estuvo a punto de
matarme, no sé aun como salí viva de esto... demo, me duele todo... kami...
En ese mismo instante,
la puerta se corre y el doctor entra con una bandeja de comida.
- Jejeje pensé que
nunca despertarías, has dormido una semana.
- QUÉ CUANTO HE
DORMIDO????????????????!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!- Kagome no creía lo que había
escuchado.
- Tranquila creo que has
recuperado ya tus fuerzas- dice sonriendo el doctor.
- Cómo llegué aquí?-
pregunta la chica mientras se toca un poco su cabeza.
- Pues si no hubiese
sido por Inuyasha-san creo que muere.
- Inuyasha? O.o... se me
hace familiar pero no me acuerdo donde lo escuché- decía Lkagome casi para sí
misma.
Pero el doctor le enseña
lo que parece ser una imagen y Kagome se queda.... mas que helada, con ganas de
haber muerto y nunca ser encontrada, el doctor nota que la mirada de ella cambia
a una muy seria.
- No puede ser
que sea ese guardaespaldas de mi hermana... me hubiera gustado mejor morir.
- Le sucede algo
Kagome-san?- pregunta el oni al ver como pensativa y seria, ella sonríe.
- Eh no! lo que pasa es
que me acordé de algo, jajajajaja!- ríe la chica como intentando cambiar de
conversación.
- En fin, coma lo que
pueda espero que sea de su agrado.
Y el oni deja el lugar
mientras que Kagome ve la comida y se acerca la bandeja.
- Jejejejeje voy a comer
algo después de todo!- decía muy animada la líder de Honshu pero...
Su sonrisa se apaga al
instante, pues no era comida común y corriente sino..
- Pero... qué es
esto... o.oU son.... INSECTOS?????????????????- en el rostro de Kagome se
muestra una cara mas que de horror- QUÉ ASCO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Así era, la pobre de
Kagome tenía como comida bichos feos, los ve y casi se vomita al verlos
retorcerse un poco aun, su estómago le ruge y en tono derrotado.
- Soy una líder de una
isla y comeré esto... ay kami, realmente estoy alucinando... no me queda de
otra que probar.
La chica de Honshu, toma
un gusano y lo ve, decide mejor cerrar los y ojos de esa forma se come esa
comida...(ya me dio horror...)
Así pasó un poco de
tiempo, al tercer día Kagome ya se sentía de maravilla y sale de esa habitación,
el doctor parecía contento.
- Que bueno que está
bien, por qué no te quedas como mi ayudante? Serías muy buena enfermera-
comenta el oni a la chica.
- Mmm no, mil disculpas
demo deseo regresar a mi hogar con mi gente- dice esas palabras Kagome mientras
se inclina un poco en señal de agradecimiento a los cuidados del oni.
- En ese caso espera-
dice el doctor mientras se va de ahí por unos instantes.
La chica se queda un
tanto extrañada porque el doctor saca de un pequeño mueble lo que era su ropa.
- Pero si es mi ropas!
- Si, mandé a que las
arreglaran y tu armadura con la que llegaste esa ocasión pues se perdió por
completo pero te doy una mía...- dice el doctor mientras saca de una caja otra
armadura parecida a que tenía la chica- las armaduras de Kyushu son las mas
resistentes, es peligroso que salgas sin ella.
- Domo arigato sensei-
agradece la chica con una inclinación casi ceremonial.
La chica se cambia y al
paso de unos minutos, Kagome estaba igual como esa ocasión que salió de
Honshu.
- Como le puedo pagar lo
que hizo por mi?- decía la chica agradecida.
- No me debes nada niña.
- Mmm ah ya!
Al decir eso, Kagome
saca de un bolsillo que tenía en el interior de sus ropas una moneda de oro con
el símbolo de los Jingo.
- Tome, como muestra de
agradecimiento – Kagome le da la moneda al doctor, éste se queda un poco
extrañado al verla.
- Esto... acaso... es de
Honshu?
- Jejejejeje si, se
puede decir que así es.... sayonara y gracias por todo!
La chica sale del lugar
y el doctor se queda mirando la moneda de oro.
- Parece que esta niña
se perdió...- comenta el oni mientras observa dicha moneda.
Kagome comienza a
caminar y ve que Kyushu realmente era un lugar frío, sin vida y siempre una atmósfera
mala lo rodeaba.
- Naraku fue
el ladrón de todo... ¬¬ ese maldito traidor! cuando regrese a Honshu se las
verá conmigo!- piensa la chica mientras
corre.
Se detiene y mira el
mar, al mismo tiempo, una brisa hacia que sus mechones de cabellos se movieran
de un lado a otro.
- Tengo que regresar a
casa, no es bueno que me quede aquí aunque... creo que debo cuidarme las
espaldas, en fin... primero veré si consigo algo.... Kikyou, hermana no sé que
quiso decir eso Naraku contigo pero desvelaré la máscara con la que te
escondes realmente....
En Honshu, Miroku se
despierta muy alterado, su respiración era muy agitada y sale de sus aposentos
con velocidad y llega a donde estaba Sango.
- Qué pasa Miroku, por
qué tanto alboroto?- comenta Sango mientras guardaba unas cosas.
- Tuve un sueño...
Kagome está viva!- dice con esperannzas el monje.
- Qué? No lo creo...
- Hasta crees que siendo
la mano derecha del líder te mentiría??- dice Miroku mientras toma las manos
de la chica.
- Pero... si es así...?-
la extermiandora no se lo creía mucho pero..
- Si realmente está
viva, no dudes que regresará a Honshu.
- Ojalá si, pues Kikyou
es cada vez peor- dice Sango un poco molesta.
- Si, enviaré un
mensaje a Seshsoumaru-sama y a Kouga-sama, de seguro que les interesará...
- De acuerdo pero cuida
de que nadie te vea, Kikyou es demasiado desconfiada...
De esa forma el houshi
se va del lugar y se encamina rumbo a otra zona del castillo, especialmente para
eso, aunque no sabe que unos hombres lo siguen paso a paso y estos desaparecen
al instante.
Kagome seguía
observando el mar, lo mira unos instantes mas y luego se va caminando rumbo a lo
que era el pueblo de Kyushu, la isla dominada por los oni...
-.-.-.-.-
N/A:
Sensei: muchos piensan que sensei significa maestro, bueno así es, aunque cuando se refieren a médicos, por ejemplo se puede decir sensei, como Kagome aquí lo dijo al despedirse del doctor.
Continuará